La Asamblea Ordinaria de San Martín de Tucumán tuvo de todo un poco. Lo primero que captó la atención fue el microestadio que casi está listo para usarlo con fines deportivos. “Finalizamos una Asamblea histórica. Vamos San Martín, carajo!”, cerró la cita Rubén Moisello. El presidente del club volvió a estar activo en su rol y comandó el acto estatutario que debía haberse realizado un par de meses atrás.

Ese fue precisamente el primer  punto del orden del día: convocatoria a “Asamblea, razones de su demora”. Moisello explicó que su delicado estado de salud había motivado la postergación. Si bien fue cuestionada la capacidad de ejecución del resto de la comisión directiva (algunos reclamaron que podían seguir las funciones y la agenda programada sin el presidente) todos los que alzaron su voz en contra de la explicación, al mismo tiempo, celebraron y le desearon una buena salud a Moisello. El presidente gentilmente prefirió no hablar a la prensa, tarea que se dificultaba ya que el directivo era requerido para fotografiarse con los cientos de personas que concurrieron. “No vamos a contar siempre. Somos unas 600 personas”, dijo con tono estricto Moisello en referencia a que, cuando una moción era aprobada por mayoría, no era necesario contar las manos levantadas ya que visualmente era clara la resolución.

De los siete puntos tratados, hubo dos que generaron tensiones resueltas. Además de la primera sobre los motivos de la postergación de la Asamblea, el cuarto tema del orden del día “Memoria, Balance e Inventario Período Contable del 01/07/2023 al 30/06/2024” generó tensión. En ese ítem, Moisello se ofuscó y hasta levantó la voz ante los reclamos de uno de los socios. “No es para que hagas un Stand Up, Augusto Rodríguez”, recriminó Moisello desde la larga mesa asambleístas de 13 personas. El socio cuestionó varias cifras de los documentos presentados. El punto, el que más tiempo tomó en discusión, no tuvo votos negativos y apenas 111 abstenciones.

El resto de los temas (lectura acta Asamblea anterior, elección de dos asociados para suscribir el acta, dictamen Junta Fiscalizadora y Auditor Contable, elección de tres miembros del Tribunal Disciplinario y elección de tres miembros de la Junta Electoral), discusiones mediante también fueron aprobados. Luego de la aprobación del cuarto punto, un socio tomó la palabra, no sólo para hacer una propuesta, también para advertir que la hora del partido (la Asamblea se hizo el viernes que jugaba el "Santo") estaba demasiado cerca y había que terminar.